domingo, 8 de abril de 2012

LA RESURRECCIÓN, UN HECHO HISTÓRICO QUE CAMBIÓ AL MUNDO

Iglesia Bethesda
Calle Guerrero 83
Col. Centro
Xalapa, Ver.

La Iglesia Evangélica en general expone que la resurrección de Jesucristo es el pilar que sostiene la predicación del Evangelio, que en una de sus interpretaciones quiere decir, las buenas nuevas de salvación.

Por ello, la celebración y enseñanza sobre el tema, son obligadas no solo en Semana Santa sino prácticamente en cada reunión de estudio bíblico o culto realizado en los templos, en las misiones o incluso en las predicaciones itinerantes y callejeras.

La Iglesia Evangélica expone que la resurrección es un hecho histórico: "Jesucristo cambió todo en el mundo, incluyendo el conteo universal de la historia, tan es así que hoy estamos en el mes de abril del año 2012 Después de Cristo, mientras que por otro lado hay huesos de homos erectus fechados 10 mil años Antes de Cristo. Jesucristo impactó de tal forma al mundo en su tiempo y hasta la fecha, que la historia tomó como base su nacimiento y aparición para imponer esto como parteaguas histórico universal. El mundo entero se ajustó a Jesucristo".

"La resurrección es un hecho polémico, bíblico, discutido, pero aceptado por millones de creyentes en la Biblia; esta fe está basada estrictamente en la primera Carta que le escribe San Pablo a los Corintios, quien en el capítulo 15 describe de forma exacta parte del misterio de la resurrección, sus efectos, previos y posteriores, y sobre todo, concluyendo con la sentencia: "Pero Cristo ha resucitado de entre los muertos, primicias de los que durmieron es hecho".

La predicación del Evangelio no se fundamenta pues en la crucifixión de Cristo como tal, aunque ésta la que reconoce la Iglesia Evangélica como el gran precio que Cristo paga para la redención y salvación humana; más bien la grandeza del Poder del Cristo se predica en su capacidad de entregar su vida por la humanidad y su misma capacidad y valor para recobrar dicha vida a través de la victoria que obtiene Cristo sobre el imperio de la muerte.

La resurrección en la Iglesia Evangélica se fundamenta además en la simplicidad de hechos: Mahoma fue muerto y su mausoleo existe con sus restos en el interior; Confucio igualmente, y así muchos grandes profetas; no así en el caso de Cristo, cuya tumba es la más visitada del mundo, pero también es la única que está vacía.